AÑO SANTO PAULINO

Con ocasión del bimilenario (aproximado) del nacimiento del Apóstol San Pablo, el Papa ha declarado un Año Santo Paulino, que se celebrará en Roma del 28 de junio de 2008 al 20 de junio de 2009. Se pondrá de actualidad “su figura, sus acciones, sus viajes y la inmensa riqueza de la doctrina que está contenida en sus cartas y epístolas". No hemos de olvidar que los escritos de San Pablo son los primeros del Nuevo Testamento, incluso anteriores a los Evangelios.

La coordinación de los actos se realiza desde la Basílica Papal de San Pablo Extramuros, en Roma, regida por Benedictinos desde el siglo VIII, que conserva los Restos del “Apóstol de las Gentes”. El responsable es el Arcipreste y Cardenal Andrea Cordero Lanza di Montezemolo. Se cuenta ya con Himno, Letanía y una representación sacra musical. El Himno lleva por título “«Se siete risorti con Cristo» («Si habéis resucitado con Cristo»).Todo ello disponible en Internet: http://www.abbaziasanpaolo.net/inno.htm.

Los benedictinos ofrecen a la meditación de los fieles los textos de San Pablo; para ello han dividido las 13 cartas (excluyen la de los Hebreos) en 365 breves textos, uno para cada día del Año Santo. Es una forma de emplear la “Lectio Divina” (Lectura Divina) de la Regla de San Benito, que consiste en la reflexión sobre la Palabra de Dios en la Sagrada Escritura, y que se articula en 4 fases: lectio, meditatio, oratio e contemplatio (lectura, reflexión, oración y contemplación). Cuando se hace en grupo como inspiración para su vida o trabajo, se añade una quinta fase: la actio o missio (acción o misión) concluyendo la reunión con la pregunta: “¿Qué cosa concretamente quiere Dios de nosotros ahora?”. Es un buen esquema para uso de todos los miembros de este Grupito de Oración.

La Basílica –la mayor después de la de San Pedro, de la que se encuentra a 11 km- y todo el complejo anexo, como el claustro y el monasterio, no son parte de la República Italiana, sino que son propiedad extraterritorial de la Santa Sede. Fue comenzada por el Emperador Constantino y luego mejorada y ampliada por los siguientes Emperadores. Sin embargo fue prácticamente destruida por un incendio en 1823. En la reconstrucción, bajo el Pontificado de León XII colaboró el Mundo entero.

Buscando el sepulcro de San Pablo, los arqueólogos comenzaron sus excavaciones en el 2002 y hasta noviembre de 2006 no pudieron sacar a la luz el sarcófago, que data al menos del año 390, y que yacía olvidado entre los estratos de los templos que fueron construidos uno sobre el otro.En la losa sobre el sepulcro se puede leer en latín: "Paulo Apostolo Mart" (Pablo, apóstol y mártir) y presenta el agujero que se realizaba para poner en contacto la reliquia con el altar, pero también para que los peregrinos pudieran introducir trozos de tela que tocasen los restos.

El sarcófago será expuesto en la Basílica de San Pablo cuando se termine completamente de examinar, pero aún no se ha decidido si se abrirá para analizar los restos del Apóstol. Según el cardenal Lanza di Montezemolo, solo el Papa puede decidir la apertura del sarcófago y aún no se ha expresado sobre esto.

La apertura del sarcófago podría desvelar nuevos misterios de la Tradición Cristiana, pues se desconoce si también se encuentra bajo la basílica la cabeza de San Pablo, que fue decapitado en el año 65 por orden de Nerón